viernes, 23 de mayo de 2014

Los libros, nuestros grandes maestros.


Image courtesy of Danilo Rizzuti / FreeDigitalPhotos.net

 En este artículo, me refiero sobre todo a los libros que expresan verdades universales. A aquellos libros, que cuando los tenemos en las manos y empezamos su lectura, no podemos dejar de leerlos porque el tema nos encanta. A esos libros, que tratan justo de lo que nos está pasando en nuestra vida, de aquellas preguntas que tenemos en la cabeza y no tenemos la respuesta. Y justo llega un anuncio, un amigo o buscando por internet sobre un tema y ¡Zas! ahí tienes lo que andabas buscando.
A mí, siempre me han pasado cosas curiosas con los libros, y supongo que a muchos de vosotros también, de hecho son mis grandes maestros, pues siempre aparecen en el momento oportuno.
Por ejemplo, mi madre me regaló el libro de "Usted puede sanar su vida" de Louise L. Hay, justo en el momento más indicado, pues yo necesitaba hacer grandes cambios en mi vida y el primero era mi forma de pensar para no enfermar y poder cambiar mis acontecimientos futuros, incluida mi salud.
Puede ser que un libro llame mi atención mientras paso por una tienda, quizás el titulo enciende en mí una dulce lucecita, como diciendo, ¡cógeme!, tengo algo que enseñarte.
Eso me pasó en la feria de Biocultura en Barcelona, me paré en un stand de libros de segunda mano y fui directa a: Almas Gemelas de Mónica Buonfiglio. De hecho lo empecé a leer en un banco en la Feria y lo terminé al día siguiente de vuelta a casa en el tren.  Fue leyendo ese libro cuando comprendí que había conocido a mi llama gemela.
Otras veces, me lo regalan en el momento oportuno, me lo recomienda alguien o incluso me ha pasado que buscando un libro en casa que no encontraba, se llegó a caer este de la estantería pudiéndolo  ver. Una vez me acuerdo que hacía más que oír por todas partes hablar del ahora, el silencio, el presente, en canciones, letreros, etc. Fue cuando decidí compra el libro "El poder del Ahora" de Edkhart Tolle y poco después me regaron un cd con un libro de su conferencia en Barcelona.
Una vez, paseando por las calles que hay al pie del Castillo de  Peñíscola,   me encontré a un vidente que era amigo de una amiga de niñez, estuve hablando con él y me dijo: cómprate el libro de "Dios vuelve en una Harley" te ayudará a comprender mejor. Bueno, pues ese libro me lo he leído muchas veces, pues parece que me estuviera hablando, el libro me daba las pautas que me ayudaría a quererme cada día más. Aún hoy en día, lo cojo de vez en cuando, para poner en practica cosas que explica en él y que a veces por el ritmo de vida se me olvida aplicarlo.
Todos evolucionamos y a veces no llegamos a entender un libro del todo cuando lo leemos por primera vez, y sin embargo, conforme pasa el tiempo, somos capaces de captar su verdadero mensaje.

Podemos leer muchos libros, pero no hay nada como experimentar uno mismo lo que describen estos. Haz, que lo que dices, haces y practicas, coincida con lo que sientes y al mismo tiempo seas capaz de exteriorizarlo mediante tus sentimientos y con el corazón.
Os deseo una buena lectura, tomaros el tiempo que necesitéis, subrayar con colores el libro, darle vuestro toque personal, pues ello será buen síntoma de que algo de él se queda con vosotros y eso será sin ninguna duda lo que más necesitáis saber en este momento.

¡Déjate guiar por tu intuición¡,  ella te llevará a elegir los libros correctos en cada momento de tu vida. Y sino no pasa nada, porque el Universo, de muy diversas maneras,  ya te pondrá en tu camino toda la información que necesitas recordar y aprender para llevar a cabo tu misión en la vida.
 
Todos tenemos una misión común, y esa es, aprender a Amar incondicionalmente, primero a uno mismo y por ende al resto. Y para ello, el Universo nos deja un montón de información en los libros, para que cada uno y a su ritmo, tenga la información que necesita en cada momento. Luego ya dependerá de la decisión de leerlo o no, ya que siempre tenemos libre albedrío.

 ¡Feliz lectura!

 Un abrazo de todo corazón y siempre hacia delante.


 Manos Pequeñas.
 
 

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